Es importante tener claro que la nutrición y la salud son cosas que están intrínsecamente relacionadas. Cuando nuestra alimentación está basada alimentos saludables podemos decir que nuestro cuerpo está cumpliendo con el proceso de nutrición. La comida sana, los vegetales, las frutas, las verduras, son el combustible que necesita el cuerpo para poder funcionar de la forma correcta. De las propiedades que contienen los productos alimenticios sacamos la energía, la fibra, los minerales, vitaminas, etc. que necesitamos para tener una buena condición física, por dentro y por fuera.
La nutrición debe estar acompañada de ejercicios y de las ganas que tengas de sentirse sano. Esto te permite desarrollarte en el entorno social que quieras y poder hacer las actividades normales de la vida cotidiana.
Los animales, los humanos y los seres vivos en general necesitan que sus nutrientes se encuentren equilibrados dentro del cuerpo y la mejor manera de obtenerlos y mantenerlos en balance es por medio de la alimentación nutritiva.
La buena alimentación es la responsable de que el cuerpo recupere todos los nutrientes, vitaminas y minerales que pierde con el paso del tiempo o por alguna enfermedad. Si no recibimos estas propiedades es imposible que el cuerpo pueda trabajar bien. Las dificultades se pueden presentar incluso al querer hacer actividades tan sencillas como caminar o incluso afecta la parte mental como la memoria.
Las comidas se pueden planificar para obtener resultados que sean apetitosos y al mismo tiempo que nos briden las propiedades que necesitamos. Las calorías no son del todo dañinas, deben estar en nuestro organismo pero hay que ser capaz de controlarlas.
Debes dejar de pensar que comer bien y hacer ejercicio solamente sirve para bajar de peso. Si tienes una buena alimentación los cambios que vas a notar en tu cuerpo son muy notables, empezando con el aumento de la energía.