Consejos para comer en restaurantes, bueno, ya sabes que hacer una dieta no implica que tengas que quedarte en casa siempre. A decir verdad saldrás y comerás en restaurantes y después te sentirás mal porque te has saltado la dieta y piensas que, todo aquello que has conseguido, ahora no te sirve de nada. Vamos a ponerle remedio dándote algunos consejos para que este malestar se vaya porque, aunque sea en los restaurantes, también puedes seguir tu dieta.
Lo primero que necesitas es fuerza de voluntad. Si eres de comer es normal que veas los platos y se te haga la boca agua pero tu tienes que tener en mente tu objetivo y el motivo por el que estás a dieta. Consiguiendo reprimirte para no lanzarte a pedir platos, has de evitar los alimentos grasos, dulces y con muchas calorías. Por eso, lo mejor es elegir platos que sean sencillos y simples.
Si, ya se que esos pueden no gustarte tanto como un buen filete, pero es lo que hay. Mejor algo de verdura o de pescado antes que carne. Si vas todos los días al restaurante no pidas siempre lo mismo, intenta variar dentro de los platos que sepas van a ser menos calóricos para ti. De hecho, si visitas mucho el restaurante a lo mejor te sorprenden con platos más personalizados para ti, menos grasos o para personas que no quieren engordar mucho.
Eso si, ten en cuenta las calorías que consumes en el restaurante para después, en casa, paliar el efecto comiendo menos o con alimentos que no tengan tantas calorías.
Y, por supuesto, mientras esperas la comida... ¡No piques! Eso es lo peor para las personas a dieta, el picoteo. Porque entonces no podrás dejar de picar, comer y después no te servirá de nada. ¿Qué hacer? Mira para otro lado, aparta el plato o pide que se lo lleven. Las tentaciones, como siempre, evitarlas al 100%.